domingo, 22 de diciembre de 2013

Razones

Por tu voz que empuja
en mi alma tan ilusa
una esperanza difusa
que la realidad estruja.

Por tus ojos negros
que ocultan el cielo
que prometen tus besos
hechos de miel y de sueños.

Por tu pelo tan bello;
por tu andar ligero
-cual hoja al viento-
por tu rostro tan tierno...

Es tan sólo por eso
que te escribo estos versos.
Es el inútil deseo
de un cerebro disperso.

Es la soga fría que ata
a mi cuello y mata
a cualquiera de mis ansias,
a todas mis esperanzas...

Por eso vivo solamente
siguiendo siempre extrañamente
los designios de mi frente
y de tu mirada indiferente.

Revolcado entre mil espinas,
sin corazones de esquina,
sin sueños, sin porfías,
ni ilusiones ínfimas...

Es tan sólo por eso
que te dedico mis versos;
Es porque ya estoy muerto
y ya no tengo sueños.

Ariel Silvermann (2003)

miércoles, 17 de abril de 2013

Tarde

Estabas tan linda
Con aquellas trenzas
Esa remera negra
Y esos ojazos canela

Estabas tan linda
En la tarde aquella
Con tu rosada carpeta
Y tu aliento a menta

Era la tarde mas bella
Era la mejor de ellas
Era la tarde nuestra
Y para siempre queda

Era dorada moneda
El sol de tu sonrisa
Calída, dulce  y tierna
Como brisa de primavera

Era la tarde aquella
Era tu boca fresca
Tus labios de princesa
Tu beso de sirena

Era la tarde aquella
De las que ya no hay muestra
Hoy solo quedan estas letras
Y mi corazón que te recuerda

Ariel Silvermann (2013)